¿Qué está pasando en Bogotá?
Es la pregunta que diariamente se hacen los bogotanos. La percepción de inseguridad en la capital de Colombia subió entre la ciudadanía a un 83.8%, mientras las autoridades hacen lo que pueden frente a la delincuencia. Y es que ya no dan abasto para tantas modalidades y trucos que las bandas organizadas internacionales se están inventando. De acuerdo con cifras de la Secretaría de Seguridad, durante el primer trimestre en Bogotá se robaron 670 motocicletas, 590 vehículos y 6878 celulares. Los ciudadanos están exigiendo respuestas; por eso el Director Seccional de la Fiscalía de Bogotá, José Manuel Martínez, aceptó el llamado del blog de Ultra Colombia y esto nos dijo:
J.A. Muchas gracias por aceptar la entrevista. ¿Cuál es el hecho delictivo más reciente en Bogotá en cuanto a robo de vehículos y sus pertenencias?
J.M. De acuerdo con la investigación se definió la existencia de una banda delincuencial especializada en el hurto de carros, motos, y personas al interior de parqueaderos y establecimientos de comercio como bares, gastrobares y discotecas. Operaban principalmente en el norte de Bogotá, como el parque de la 93, los Héroes, Zona T o Galerías.
J.A. ¿Cuál era el modus operandi de los ladrones?
J.M. Lo hacían a través de un dispositivo especial remoto que tiene un valor aproximado en el mercado negro de $20.000.000.
J.A. ¿Cómo operaba ese dispositivo especial?
J.M. Con el mismo aparato cumplían tres funciones; primero, lograr de manera efectiva inhibir la señal de la alarma y el bloqueo de los automóviles; el segundo, desbloquear las puertas de los mismos y el tercero clonar o copiar el código interno de la alarma, para luego de hurtar los elementos, cerrar el automóvil.
J.A. ¿Cuáles son los elementos que por lo general se robaban?
J.M. Luego de darle abertura al vehículo, sin distinción de su marca, extraían tanto del interior como de los baúles, todos los objetos de valor que encontraban. Equipos electrónicos, celulares, dinero, joyas, maletas, prendas de vestir. Todo lo que veían que pueda tener un valor comercial.
J.A. ¿Escogían al azar los vehículos para robarlos?
J.M. Los ladrones tenían un esquema de contrainteligencia con una marcación previa de los automóviles. Les hacían seguimiento a gran velocidad hasta que los ubicaban en parqueaderos y comenzaban la operación del robo.
J.A. ¿Cómo actuaron las autoridades?
J.M. Llegar a su captura fue el resultado de una concentración de esfuerzos investigativos de la Fiscalía y la Policía Nacional de Colombia. Identificamos que no solamente operaban y robaban en la capital, sino en otras ciudades del país como Cartagena y Medellín.
J.A. ¿Qué hacían los delincuentes con las pertenencias hurtadas?
J.M. Tan pronto conseguían cada botín, armaban una red de logística en la que enviaban celulares y equipos electrónicos a otros países como Brasil o Ecuador y el resto lo comercializaban en el mercado negro de las principales ciudades. En el centro de Bogotá, particularmente hemos ingresado en operaciones de extinción de dominio para desmantelar esta red criminal.
J.A. ¿Sitios de Bogotá donde se han presentado este tipo de casos?
J.M. Nombraré dos. La 116 con Autopista en la que los ladrones esperaron a que los ocupantes del vehículo se bajaran en un parqueadero, luego un atracador abrió el carro con el dispositivo remoto, mientras otros tres vigilaban como centinelas. Otro en la calle 235 con Auto norte también donde en menos de 5 minutos extrajeron elementos electrónicos mientras el carro estaba parqueado en una estación de servicio. Las localidades de Suba y Usaquén, las más afectadas.
J.A. ¿Alguna recomendación para la ciudadanía?
J.M. Lo recomendable es no dejar objetos valiosos a la vista, guardar todo en el baúl o llevarse consigo los elementos. También es prudente parquear solo en parqueaderos recomendados y no en la vía pública. Una gran medida de seguridad es mantener los vehículos con sistemas de alarmas anti clonación o que no permitan desencriptar sus módulos de control, que entiendo ya están en el mercado colombiano.